Un ejemplo de cumplimiento con los valores límite es la corriente de fuga. Esta corriente fluye incorrectamente a través del conductor de protección y, según la ley, no puede ser superior a 500 µA. En los Estados Unidos, el límite es de 300 µA. En la tecnología médica, cada dispositivo utilizado (ordenador, pantalla, láser o cámara) crea una corriente de fuga por lo que, con el elevado número de dispositivos médicos en una habitación, el límite se alcanza y se supera muy rápidamente. Contramedidas necesarias: Un transformador de aislamiento médico REOMED.
Encontramos frecuentemente un REOMED en los carros médicos. Estos llevan numerosos dispositivos médicos habituales en hospitales, centros de investigación médica o quirófanos por lo que el transformador de aislamnieto proporciona la fuente de alimentación para todos los dispositivos conectados a él.